Cada planeta de nuestro sistema solar tiene un efecto determinado; su comportamiento y “reputación” es resultado de observaciones y datos estadísticos acumulados por los astrólogos desde tiempos inmemoriales.
En el tema astrológico de un individuo lo que más importa es la posición del sol, que determina su Signo natal.
El Sol: Es el “dador de la energía vital”, y da mucha seguridad y arrogancia al nativo.
Mercurio: Es la comunicación, la palabra, hablada y escrita. En el tema natal indica el intelecto, la movilidad, la capacidad para expresarse, la curiosidad y la capacidad histriónica.
Venus: Da belleza física, amor por las artes y por la armonía, también la capacidad de amar. En el tema femenino indica la emotividad y la sensualidad. Determina el talento artístico. Sus efectos son feminizantes.
La Luna: es el mas poderoso de los cuerpos celestes, después del sol. Regula las emociones, el ciclo femenino, y a la vez amplifica los demás efectos planetarios.
Marte: Da fuertes impulsos, fuerza física, potente voz y agresividad. Determina la sexualidad masculina y su potencia. Sus efectos son virilizantes.
Júpiter: Es la “suerte mayor”, sus efectos son jovialidad, bondad, indulgencia, amor por la naturaleza y también por todo lo abundante y placentero.
Saturno: Es el “ejecutor del destino”, poniendo obstáculos en el camino de la vida, pero también da constancia y tenacidad. Otorga gran inteligencia, capacidad de análisis, lógica y serenidad. Atenúa las emociones.
Urano: Da el ingenio, la chispa, la innovación; es el planeta regente de la era Acuariana. Sus efectos hacen sublevar al nativo contra todo lo obsoleto y vencido. También otorga gran amor por el pasado remoto.
Neptuno: Es el “planeta de la confusión” en su manifestación primitiva, pero en la elevada significa espiritualidad, inspiración, altruismo y amor universal.
Plutón: Es la destrucción y renovación, el regente de las profundidades, tanto de las entrañas de la Tierra, como las del alma humana. En el amor es el impulsor del sexo, la fuente del más poderoso magnetismo sobre el sexo.
¿De qué color es la tristeza? -, Preguntó la estrella al cerezo.
